Todo esto junto es una bomba a punto de estallar.
Y es que, sin duda opositar en verano cuando eres madre trabajadora y encima vives en el sur de España debería considerarse deporte de riesgo.
Tengo que confesar, que a mí personalmente el verano me está costando horrores sentarme frente a los apuntes, rara vez consigo lo planificado y en ocasiones dejo de planificar porque total ¿pa' qué? Por suerte llevo dos días sin encender el ventilador, lo cual espero que sea buena señal y que el verano esté empezando a hacer las maletas y despedirse. Aunque con ello, signifique que yo probablemente también sea despedida de mi trabajo y que la fecha de examen para el que de momento estoy excluida se acerque. ¿Será esta mi oportunidad definitiva?
He decidido retomar el blog, como podéis ver, he cambiado la imagen y estoy en reformas, pero es que no entiendo en qué momento decidí dejarlo, así que aunque ahora tengo claro que esto es solo mero desahogo y que el éxito que yo creía que iba a tener en su día no va a ser, quiero seguir escribiendo, contando historias y experiencias sobre mi maternidad y mi opovida; dejando salir a pasear a mis demonios de vez en cuando y en definitiva, quiero volver a ser yo.
Aquí tenéis mi nuevo opoblog, receta mejorada y con miles de letras que agrupar en forma de textos que, espero, os hagan sentir algo.
La primera entrada después de todo este tiempo, es a modo de diario, donde voy a ir contando mis experiencias opositoriles, mis sensaciones, mis triunfos y mis fracasos, porque sí, las oposiciones no son perfectas cuando eres mamá, trabajadora y ama de casa, y la vida mr wonderfull que se muestra muchas veces en las redes. bajo mi punto de vista, es puro postureo; así que podéis llamarme tranquilamente la destroyer de las opomamis, la hater de la vida perfecta, yo orgullosa y feliz.
Os cuento, que el verano en lo referente a las opos ha sido todo un desastre, misión fallida, pero la realidad es que voy avanzando aunque sea a pasos de tortuga, lenta pero segura y con muchas ganas de enfrentarme de nuevo a las convocatorias de la UMA, esas, con las que empecé este blog hace ya casi cuatro años.
Una vez más, bienvenidas de nuevo, espero que mis fieles seguidoras sigáis ahí, y espero atraer a más criaturillas como yo, apasionadas de la lectura y las historias ajenas.
Pasad y leed, sed felices.
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